La nuez es un fruto seco rico en proteínas, vitaminas, ácidos grasos omega 3 (poliinsaturados), oligoelementos y fibra. Las nueces, al tener un alto contenido en fibra, producen un efecto saciante, por lo que pueden ser de gran ayuda a la hora de enfrentarnos a una dieta.
Escrito por: Yaneth Díaz Coordinadora Escuelas Digitales Campesinas Cundinamarca
Un puñadito de nueces al día nos proporciona gran cantidad de minerales, vitaminas y ácidos grasos poliinsaturados que nos ayudan a regular los niveles de triglicéridos y colesterol. Esto, además de mejorar la salud del corazón, disminuye considerablemente el riesgo de padecer diabetes tipo 2 (la diabetes más frecuente en personas de edad avanzada y, que se produce, como consecuencia de un aumento de la resistencia de las células del organismo a la insulina).
Su alto contenido en omega 3 y sus niveles de polifenoles con acción antioxidante son responsables de estos beneficios que reivindican el papel de las nueces en las personas con obesidad, pues a pesar de concentrar energías y contener grasas, su calidad nutricional y consumo en pequeñas cantidades a diario puede mejorar los factores de riesgo cardiovascular y con ello, ayudar a perder barriga y tratar la obesidad y sus enfermedades asociadas.
Al ser un fruto seco muy rico en vitaminas y antioxidantes, parece que su consumo de forma regular beneficia al sistema nervioso, en especial al cerebro, y ayudaría a prevenir la demencia senil y el Alzheimer, mejorando la memoria.
Gracias a los antioxidantes y fitoesteroles también se ve disminuido el riesgo de padecer cáncer de mama.
Las nueces, también son beneficiosas para la salud del cabello. Parece ser que su consumo frecuente estimula el crecimiento y evita la caída capilar.
De todas formas, no debemos olvidar, su alto contenido calórico, por lo que no debemos abusar de ellas si queremos evitar la obesidad. Algunos expertos aconsejan no superar la cantidad de diez nueces al día.