En el marco de la visita realizada por el Papa Francisco a Colombia, el pasado mes de septiembre, el Santo Padre resaltó de manera significativa el medio ambiente y la naturaleza que hay en Colombia.
Sus discursos, aunque enfocados en algún tema en particular, fueron también una especie de eco de su carta Encíclica Laudato si’, sobre el cuidado de la casa común y la armonía entre los seres humanos. Le puede interesar: A un mes de la visita del Papa a Villavicencio
Durante su encuentro con las autoridades, el cuerpo diplomático y algunos representantes de la sociedad civil, en la Plaza de Armas de la Casa de Nariño (Bogotá), el día Jueves 7 de septiembre de 2017, el papa Francisco recordó que
“Colombia es una Nación bendecida de muchísimas maneras; la naturaleza pródiga no solo permite la admiración por su belleza, sino que también invita a un cuidadoso respeto por su biodiversidad”*.
Además, como si fuera un experto en el tema, añadió: “Colombia es el segundo país del mundo en biodiversidad y, al recorrerlo, se puede gustar y ver qué bueno ha sido el Señor (cf. Sal 33,9) al regalarles tan inmensa variedad de flora y fauna en sus selvas lluviosas, en sus páramos, en el Chocó, los farallones de Cali o las sierras como las de la Macarena y tantos otros lugares”*.
Recordar el llamado del Papa a proteger el medio ambiente
Francisco también hizo un llamado a la protección del medio ambiente en el que vivimos y al respeto por nuestros hermanos indígenas, manifestando: “pienso […] en la arcana sabiduría de los pueblos indígenas amazónicos y me pregunto si somos aún capaces de aprender de ellos la sacralidad de la vida, el respeto por la naturaleza”**.
Y es que todo parece relacionarse en este momento: fe, naturaleza, paz. Así lo podemos entender tras la homilía pronunciada en Catama, Villavicencio: donde el Papa expuso que: “(…) nos toca a nosotros decir sí a la reconciliación concreta; que el sí incluya también a nuestra naturaleza. […] Un compatriota de ustedes lo canta con belleza: «Los árboles están llorando, son testigos de tantos años de violencia. El mar está marrón, mezcla de sangre con la tierra» (Juanes, Minas piedras)”***.
¿Estamos trabajando en lo solicitado por el Papa?
No dejemos, pues, que estas palabras pronunciadas por el Papa Francisco se queden en un escrito. Por el contario, trabajemos por tenerlas presentes en todo momento: que hagan eco en nuestras vidas para llevarnos a valorar lo que tenemos y poder disfrutar de todo lo que Dios nos ha provisto. Le puede interesar: Carta del Papa a un soldado colombiano herido
Cambiar la actitud que tenemos de explotar los recursos naturales de un modo atroz aunque esto implique oprimir al prójimo, y trabajar en pro de una equidad auténtica entre los conciudadanos, es el primer paso hacia la transformación de la nación colombiana: una casa común, con un medio ambiente lleno de riquezas naturales, pero que necesita vivir en paz.
Por: Kewin Ospina y Andrés Laguna, Facilitador EDC Valle del Cauca y Cauca.
Editor: Ana María Rizo Díaz- Periodista Editora
