El departamento del Atlántico es uno de los más afectados por el comercio ilegal de huevos y carne de tortuga de las especies Hicotea e Iguana, que aumenta especialmente en época de la Semana Santa, según informó el biólogo Joe García, encargado del área de Biodiversidad en la Corporación Autónoma Regional del Atlántico, C.R.A.
Este animal se encuentra amenazado de acuerdo a la Resolución 0192 de 2014, ya que en el país existe un alto índice de tráfico por su facilidad de extracción y de movilización.
En algunos lugares suelen asfixiarlas tras sacarlas de las lagunas, ciénagas y partes inundables de ríos, para comercializar su carne. Estas prácticas atentan contra la fauna silvestre y pueden llegar a causar intoxicación a quienes las consumen.
Con el fin de prevenir el tráfico ilegal de Hicotea (Trachemys scripta callirostris) y otras especies de la fauna silvestre en el departamento, la C.R.A, en ejercicio de autoridad ambiental, su Centro de Reacción Inmediata Ambiental CRIA y la Policía Ambiental del Departamento, intensificaron las acciones y operativos de control y vigilancia.
Desde la primera semana de abril se están llevando a cabo controles en los peajes de las carreteras del departamento, la terminal de transporte y las plazas de mercado de los municipios de Galapa, Soledad, Malambo y Puerto Colombia.
La Corporación y la Policía Ambiental estiman que el precio de venta dentro del mercado ilegal de estas especies oscila entre los 10 y 15 mil pesos para Iguanas y 20 mil para Hicoteas, sin embargo, para el biólogo García, el valor ecológico de estas especies para los ecosistemas del Atlantico es incalculable.
“Todos los animalitos decomisados han sido liberados al medio natural, en humedales – Ciénagas de los Municipios de Malambo, Sabanalarga. Santo Tomás y Ponedera” expresó el funcionario García.
Es importante resaltar que en el 2016, se decomisaron 185 ejemplares vivos, 56 individuos sacrificados y 90 huevos en operativos de control y vigilancia. Este año se han decomisado 63 especies vivas, 22 individuos sacrificados y 32 huevos.
Autor: Maria Luisa Pedraza, Estudiante de Comunicación Social. @LuisaPedraza80
Editor: Katherine Vargas Gaitán, Periodista Editora. @KatheVargasg