Teniendo en cuenta la situación actual de Mocoa, días después de la avalancha que destruyó gran parte de la ciudad y hasta el momento ha dejado más de 300 muertos, el Banco Agrario de Colombia anunció que la cobranza de cartera de esta jurisdicción se suspendió a partir del 1 de abril, por un total de 90 días.
La medida se tomó en consideración con los damnificados, quienes lo perdieron prácticamente todo y, por ende, las personas que actualmente tienen obligaciones financieras con el banco no incurrirán en mora durante este tiempo. Los clientes del banco en Mocoa ascienden a 2.760, con una cartera de $22.250 millones.
Así mismo, durante estos 90 días de gracia, no se realizarán reportes a centrales de riesgo, y las calificaciones individuales de los clientes mantendrán el puntaje de vida crediticia que hasta el momento manejan.
Así mismo, la gestión de cobro será suspendida para los clientes con obligaciones en mora durante el mismo término de tiempo establecido y, a su vez, el banco está evaluando nuevas fuentes de financiamiento que permitan la reactivación de actividades productivas en la regió,n con el fin de apoyar el resarcimiento de la economía en la capital del Putumayo.
Luis Enrique Dussán López, presidente del Banco Agrario de Colombia, aseguró: “De esta manera, ofrecemos una respuesta inmediata para aliviar la situación financiera de los damnificados, mientras diseñamos una solución de fondo y también nos ponemos a tono con varias de las medidas definidas por la Superfinanciera, en relación con la atención preferencial a los afectados por la avalancha de Mocoa”.
Este es un ejemplo de las medidas que se toman por parte de las entidades estatales y privadas, para colaborar con la situación que están atravesando cientos de familias en Mocoa, Putumayo.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, dijo que “esta es una medida transitoria de choque y busca disponer de un tiempo que nos permita el diseño de una solución estructural y definitiva, como nuevas fuentes de financiamiento para reactivar la actividad productiva de los clientes”.
Autor: Katherine Vargas Gaitán, Periodista Editora. @KatheVargasg