Desarrollo Sostenible: desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades (Comisión de Bruntland).
Por: Maribel Bustamante, facilitadora EDC- Caquetá
Ya se ha hablado mucho de desarrollo sostenible o sustentable en diferentes medios y de diferentes maneras, y es tiempo de llevarlo a nuestra realidad del campo colombiano. Según la Unesco el concepto de Desarrollo Sostenible fue descrito en 1987 en el Informe de la Comisión de Bruntland definido como “desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades”.
Entonces es sabio y humilde entender que el desarrollo sostenible involucra las acciones en nuestro presente para asegurar nuestra vida cómoda sin llegar a dañar nuestro entorno de manera que las generaciones futuras puedan también disfrutarlo.
Si bien el campo colombiano no se halla en una crisis profunda, si estamos llamados a actuar antes que esta llegue a ser irremediable. La producción agropecuaria colombiana es bendecida por la variedad en sus cosechas y la magnificencia de la producción alimentaria durante todo el año, sin inconvenientes de estaciones climáticas. Esto permite que podamos apostarle, como lo enmarcó el Presidente Santos el pasado año ante las Naciones Unidas, al desarrollo sostenible a través de acciones de sostenibilidad.
Desde el seno de la familia campesina debe florecer el amor por el campo, el medio ambiente y la vida en comunidad, como una herramienta para afianzarse en la producción agropecuaria limpia, orgánica y amigable con el entorno natural. El desarrollo sostenible, como un conjunto de procesos responsables, se puede ver reflejado en la experiencia de vida que llevan muchas familias que integran Finca Amazónica, incentivada por la Vicaría Sur de la Diócesis de Florencia.
Dentro de los diferentes aspectos que destacan este modelo de experiencia de vida en el desarrollo sostenible encontramos el cuidado de la biodiversidad y la naturaleza, conformación de grupos de ayuda mutua y asociaciones, fomento de la seguridad alimentaria familiar, crecimiento comunitario y espiritual.
Como base fundamental para el desarrollo sostenible familiar campesino se debe iniciar por garantizar el alimento producido en nuestra parcela o finca. Cultivar verduras, frutas, legumbre y hortalizas nos permitirá disminuir el costo de la canasta familiar, y un valor agregado a la salud, a través de una producción orgánica, cero (0) uso de agro insumos y pesticidas.
Otro aspecto de gran importancia es la siembra y cosecha de agua, por medio de recuperación de fuentes hídricas y la conservación de bosques rivereños. Esto a su vez, y con la conservación de bosques, permitirá la protección y promoción de la biodiversidad en nuestro predio o vereda.
Pensar en hacer parte de la promoción del “desarrollo sostenible” es posible y es nuestra realidad. Contribuyamos desde nuestra unidad familiar a lograr un medio ambiente saludable, una cultura libre, una economía accesible y una sociedad feliz.