El senador Carlos Felipe Mejía resaltó en el marco de un debate de control político sobre la economía cafetera que se realizó en el Congreso de la República, que el problema más grave que tiene el sector hoy en día es la baja mano de obra para trabajar. Un problema que aseguró, tiene que ver directamente con el aumento de los cultivos de coca en el país.
Por: ElCampesino.co
«Lo que hemos demostrado es que uno de los problemas graves que tiene la caficultura colombiana es la falta de mano de obra y uno de los sectores que compite por ella son los cultivos de coca que han crecido de manera exponencial en los últimos tres años: pasamos de 46 mil hectáreas a terminar el 2015 con 160 mil hectáreas y ya estamos por 200 mil hectáreas», afirmó.
Mejía, quien hace parte del partido del Centro Democrático aseguró que los cultivos que están en el territorio nacional tienen un área similar a la del departamento del Quindío que cuenta con 185 mil hectáreas. Crecimiento, que ha llevado a que las personas dedicadas al sector cafetero -en el que hay varias dificultades para generar gran rentabilidad-, han pasado a ser ‘raspachines’ de los cultivos ilícitos.
«Ese déficit para la recolección de la cosecha de mitaca – cosecha que representa entre el 30 y 37 % del total de la producción-, es aproximadamente de 35 mil recolectores en la zona central del país, departamentos de Caldas, Quindío, Risaralda, Tolima y Antioquia. Esos 35 mil recolectores se han ido como raspachines principalmente al sur del país», asegura.
El congresista incluso ejemplificó: «gana 25 mil pesos un jornalero cafetero y gana 80 mil pesos diarios un raspachín», por lo que dijo que lo que se necesita es aumentar la rentabilidad de la caficultura invirtiendo en el campo.
El ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, quien participó del debate, aseguró que durante este Gobierno se han invertido más de 5,4 billones de pesos para ayudar a las casi 600 mil familias que dependen de esta actividad.