Tres puntos de la negociación en La Habana incorporarán un enfoque de género, debido a la victimización de mujeres y minorías sexuales en el conflicto.
Según la Unidad de Atención a las Víctimas, las mujeres y la población sexualmente diversa son las principales víctimas del desplazamiento forzado y crímenes sexuales cometidos durante el conflicto armado en Colombia. Por este motivo, se trabajó en una subcomisión de género que logró incorporar en tres puntos de la negociación un enfoque de género para incluir a estas poblaciones en la negociación.
La discusión partió desde la premisa que las mujeres son indispensables en el desarrollo del campo, pero no tienen igualdad de oportunidades respecto a los hombres. La Corporación Nuevo Arco Iris hizo un resumen de la incorporación del enfoque de género en las negociaciones de paz:
Punto 1: “Hacia un nuevo campo colombiano: reforma rural integral”
Se incluyeron mecanismos de acceso especial a tierras, medidas específicas para que puedan ser propietarias de tierras en igualdad de condiciones y facilitar el acceso a proyectos de economía solidaria. La perspectiva de género será parte del plan nacional para la comercialización de la economía campesina, familiar y comunitaria. Se busca promover la organización y la autonomía económica de las mujeres.
Punto 2: “Participación política: hacia una apertura democrática para construir la paz”
Habrá mecanismos que buscan facilitar la participación de las mujeres en las discusiones sobre garantías para la oposición. Se buscará que tengan interlocutores con el Gobierno en todos sus niveles.
A las mujeres elegidas se les dará protección especializada para ocupar cargos de elección popular, al igual que las defensoras de Derechos Humanos y líderes sociales que así lo requieran. Las organizaciones y movimientos sociales de mujeres, jóvenes y población LGTBI podrán acceder a asesoría legal y técnica para su creación y fortalecimiento.
Punto 4: “Solución al problema de drogas ilícitas”
Las mujeres productoras serán incluidas para que participen activamente de los procesos de sustitución voluntaria. Tendrán protección inmediata si entran a estos programas.
Las mujeres consumidoras o parte de estos escenarios podrán ser parte de un programa nacional de intervención. Este tendrá un enfoque diferencial que se ajusta a sus características particulares y tiene en cuenta la relación entre el consumo de drogas y la violencia de género.
Punto 5 “Sobre víctimas”
Se estableció la formación un grupo de trabajo de género en la “Comisión para el esclarecimiento de la verdad, la convivencia y la no repetición”. Este visibilizará las formas diferenciales en que el conflicto afectó a las mujeres. Los delitos que han afectado a las mujeres de manera específica y grave no serán parte de ningún tipo de amnistía.
La Corporación Arco Iris concluyó que el enfoque de género es crucial para la paz en Colombia. En su informe al respecto concluyo que “la inclusión de este enfoque en los acuerdos es en un gran avance en el reconocimiento de la deuda histórica de la sociedad colombiana con las mujeres y la población sexualmente diversa, y abre escenarios importantes para la garantía de derechos de esta población en el país”.